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La cosecha es nocturna y manual, las uvas pasan primero dentro de una cámara fría. La vinificación se hace a temperaturas bajas y controladas para expresar la parte aromática de la uva. La crianza se hace en tanques de acero inoxidable.
Resulta un vino fresco, aromático, agradable y fácil de tomar.
A tomar en su juventud.
Eduardo empezó su formación en España en 2007, haciendo la maestría en enología y trabajando para bodegas Torres. Al regresar a México, lanzó vinos Kruger. Su idea ha sido siempre hacer 100% del vino, desde la viticultura a la vinificación y la crianza en su bodega. Utiliza uvas de diferentes valles para obtener una expresión final compleja y equilibrada en sus vinos.